martes, 22 de agosto de 2017

¡SI ME QUERÉIS IRSE!

¡Si me queréis irse!


No quería yo escribir nada sobre esto, porque me parece que cada uno debe actuar según su conciencia en éste y en todos los asuntos, pero como quiera que se reciben señales por todas partes, y éstas no vaticinan nada bueno, me veo obligada a advertir, ya que parece que algunas personas no caen por sí mismas, que no voy a consentir en ninguna de mis ventanas de las redes sociales que se siga incitando al odio y a la xenofobia. 


Así que si tú,  cristiano, católico, apostólico  y romano, que entiendes tu religión a tu conveniencia, que no la practicas nada más que para lucirte, que has olvidado que las enseñanzas y el sacrificio de Jesús de Judea fueron para conseguir  un mundo de igualdad y amor ente los hombres, que sepas que te desprecio y que te voy a bloquear, porque yo no soy como tú.



Tú, cura, que desde tu púlpito te permites juzgar a los demás, cuando en la vida has predicado con el ejemplo y utilizas tu magisterio para  hacer política a favor de tus intereses, que siempre son económicos, y tapas y justificas horribles crímenes contra la infancia, si es que no  los practicas tu mismo, que sepas que voy a difundir tus fechorías y tus disparates para que los sepa todo el mundo.



Tú, cateto de mierda, que se te ha olvidado que tus mayores fueron emigrantes, que fueron acogidos por otros países donde se les dio el trabajo que  tu país no era capaz de generar, pero que sin embargo prosperó a base de las divisas que llegaban gracias a ellos.



Tú, desgraciado desagradecido, que te has olvidado que tus antepasados fueron refugiados en otros países cuando tuvieron que huir de éste porque habían perdido una guerra, y allí se les dieron oportunidades de desarrollo sin pedir nada a cambio. 



Y tú, españolito feroz ¿de verdad te crees que eres mejor que otros porque hablan una lengua distinta a la tuya? ¿Resistiría tu estirpe un expediente de pureza de sangre? 

¡Vamos ya que estáis tentando a la suerte con tanta soflama fundamentalista! ¡No contéis conmigo para nada, iros por vuestra cuenta antes de que os excluya yo para siempre!





  1.  ¡Yo no quiero que seáis mis amigos!

2 comentarios:

  1. Gloria Guerrero comenta

    No quiero comentar nada sobre este asunto, puesto que he decidido no opinar en un tema en el que todo el mundo está compartiendo muchas sandeces y pretenden dar soluciones de una simpleza pasmosa, a un tema que solo se puede tratar desde un profundo conocimiento de los entresijos que mueven los hilos del poder en el mundo y desde luego, creo que no conozco a nadie que este cerca de ese circulo.
    El miedo es inevitable y la intolerancia se dispara por el instinto de supervivencia, pero no es la solución. Así que me quedo con tu reflexión, es lo mas sensato.

    ResponderEliminar