sábado, 14 de noviembre de 2015

LLORANDO POR FRANCIA


LLorando por Francia.



Una vez más el odio ha golpeado donde más nos duele. Si con el ataque a las Torres Gemelas se trató de dañar el símbolo del poder económico de los Estados Unidos y sus aliados , ahora el odio terrorista va directo al corazón mismo de nuestra civilización,  no es un ataque a Francia no, es a todos los ciudadanos del mundo libre, a todos nosotros los que nos sentíamos protegidos gracias a un puñado de franceses que  lucharon y abrieron el camino para que hoy disfrutemos de derechos y libertades, con nuestros más y nuestros menos, pero en marcha  y con medios para mejorar cada día  nuestras vidas. Aunque como herederos dejamos mucho que desear, no hemos sabido adminsitrar tan magna herencia y con torpeza la estamos dilapidando, es suicida que doscientos veintiséis años después de aquella primera “Déclaration des droits de l'homme et du citoyen”,  no sepamos siquiera qué clase de mundo vamos a dejar a nuestros hijos.
LLoremos hoy por Francia que es lo que toca, pero desde mañana mismo exijamos a nuestros políticos que piensen cuál es la solución, que olviden los métodos seguidos hasta ahora y  no yerren más. Y si no saben que se vayan,que dejen pasar a otros, que esto es muy grave y no lo vamos a poder aguantar mucho tiempo.



jueves, 5 de noviembre de 2015

FLEQUILLO




Las señoras de la Candidatura d'Unitat Popular (CUP), partido político de corte independentista catalán,  se empeñan en alejarse de España a como dé lugar, como dicen los mexicanos, y no tienen reparo en desprenderse hasta del refranero tradicional, tan español él, a pesar de su utilidad para el conocimiento de la antropología social de este país. Con eso de que El hábito no hace al monje, la sabiduría popular concluye en que es inútil juzgar a las personas por su aspecto externo, porque nada tiene que ver el interior con el exterior de la gente. Parece ser que esto no lo han entendido bien estas mujeres, y aunque guapas y hermosas hembras mediterráneas, no han tenido empacho en cambiar su aspecto cortándose el flequillo a la vasca. La cosa  tiene su mérito y muy importante tiene que ser para ellas su propósito político para sacrificarse de esa manera.

domingo, 1 de noviembre de 2015

EL DIA DE LOS MUERTOS



EL DÍA DE LOS MUERTOS



No se sabe por qué en mi familia cercana no se ha cultivado la costumbre de honrar a los muertos , no visitamos cementerios, ni hacemos funerales, ni el día Dos  de Noviembre, ni ningún otro. Se supone que ese desapego obedece a alguna razón, las familias son pequeños mundos y   los padres marcan la pauta de las costumbres que después los hijos seguirán practicando el resto de sus vidas. No hemos recibido el testigo de la tradición, para nosotros, lo mismo da que sea el Día de los Muertos como el Día de los Vivos, no hay nada que celebrar.

Seguramente esa sea la razón por la que  no me molesta en absoluto que se hayan cambiado las velas y plegarias en recuerdo de los muertos, por los divertidos disfraces terroríficos y la algarabía infantil del “truco o trato” de la fiesta de Halloween ¿qué importa una cosa u otra si se trata de celebrar la llegada del otoño?


Teniendo en cuenta que son raras las tradiciones estadounidenses que no tienen raíces europeas, prefiero no considerar la asunción de esta nueva costumbre como una claudicación ante la invasión cultural yanqui. Esta es una celebración de origen celta que tiene más de tres mil años  y como un boomerang ha ido de acá para allá, para volver corregida y aumentada y ahí está, ha venido para quedarse sin afán excluyente, quién quiera que celebre el día de los Santos y siga rezando a sus muertos y quién no, que se disfrace de bruja o demonio y corra por las calles llamando a las puertas, que a mi me da igual, yo no hago ni lo uno ni lo otro. ¡Por Manitú!