martes, 23 de enero de 2018

DE IMPUESTOS Y VOTOS, MIRE USTED


DE IMPUESTOS Y VOTOS, MIRE USTED.
 
Yo soy la dueña del poder, del poder que yo tengo, que es como el de usted y como el de cualquiera, ni más ni menos. Somos dueños de un voto, un voto necesario, un voto deseado, un voto libre.

Y también soy yo la que paga, como usted, como cualquiera, y aquí están incluidos todos los que andan por el país, sean nacionales o extranjeros, hasta los niños pequeños, los medianos y también los lactantes. Porque todos pagamos los tributos necesarios para costear al estado, sean tasas, contribuciones especiales, impuestos directos e indirectos, impuestos especiales, toda clase de gravámenes van a nuestra costa, como ciudadanos que somos. ¿Que los lactantes no pagan? Claro que pagan: sus chupetes, sus biberones, sus carritos, sus leches maternizadas, todo, todo lo que se compra para ellos está gravado con el Impuesto del Valor Añadido, el omnipresente IVA. Y no está mal, no debiera ser tan caro, pero pero no está mal. Bueno, no estaría mal si ese dinero que todos pagamos fuera bien administrado y su destino fuese el bienestar de todos, todos, incluidos los lactantes y los extranjeros, mire usted.

Por eso, porque nuestro voto es nuestro y porque nosotros pagamos, tenemos que ser conscientes de que no podemos consentir más desvaríos, ni más enriquecimientos ilícitos, ni más financiaciones de partidos políticos a todo trapo para ganar elecciones y entregar los contratos a sus amigos benefactores.

Y aquí lo voy a dejar por hoy, no sin antes recordar al Alcalde Presidente del Excmo Ayuntamiento de Granada, señor don Francisco Cuenca Rodriguez;al Presidente de la Diputación Provicial de Granada señor don José Entrena Ávila, al Subdelegado del Gobierno de España en Granada, señor don Francisco Fuentes Jódar; a la titular de la Delegación del Gobierno de la Junta de Andalucía en Granada, señora doña Sandra García Martín,que ocupan el puesto que ocupan porque nosotros pagamos unos impuestos, que su única misión es organizar la convivencia ciudadana y administrar los presupuestos asignados de manera que todos los servicios sean prestados a las personas de forma impecable, que no están ahí para hacer la guerra sucia entre partidos, con miras a las elecciones futuras, que ya basta de zancadillas de unas administraciones a otras, que los triunfos tienen que ser de todos y los fracasos también, que desde el momento en que asumen el cargo, dejan de estar al servicio de su partido y pasan a estar al nuestro, al de la gente que vota y paga, que se pongan de acuerdo en todo y para todo, que no se trata de lucir el collar o el bastón, o de viajar con chófer, que no son autoridad por si mismos, no más que cualquiera, sino por el puesto que ocupan y el servicio que prestan. Que la dignidad que ostentan lo es por razón de su cargo, y que el cargo es para servir a los ciudadanos y no a su partido.

Que recuerden que yo soy dueña de mi voto, como usted, como todos, y que lo vamos a usar según se hayan conseguido los objetivos pendientes. Y que si esta provincia sigue estando a la cola del progreso y de la dignidad cuando llegue la hora, no solo vamos a usar nuestro voto de castigo, es posible que nos pongamos a pensar alguna forma de ahorrarnos algunos impuestillos, oiga usted, que igual se está acercando la hora del trueque y los trabajos de buena vecindad. Que no somos tan tontos e igual se nos ocurre algo. Mire ussteddd.

miércoles, 10 de enero de 2018

HARTURA

HARTURA
   
La gente normal, la de la calle, la que paga todo y por todo; nosotros, los que somos como usted o como yo, que cualquier cosa que hayamos conseguido nos la hemos trabajado a fondo; los que vulgarmente ocupamos un puesto en el grupo conocido como "el común de los mortales ", sabemos que si no acatamos y cumplimos con las normas establecidas, las leyes, es posible que se nos castigue, se nos sancione, incluso puede ser que tengamos que ir a la cárcel. De hecho tenemos bien claro, que los centros penitenciarios están repletos de personas por esas razones. Por eso tenemos cuidadito de no faltar a la legalidad. No obstante, algunas personas que por las razones que sea fallan y se ven privados de libertad, cumplen su pena y pagan su tributo a la sociedad, otras huyen y se van del país, y a ninguna de ellas, por muy delincuentes que sean, se les ocurre, pretender presidir un parlamento autonómico o, ni tan siquiera, ocupar una plaza en una asamblea legislativa.
Otro día podemos analizar si los delitos cometidos son merecedores de prisión preventiva o no, o si habría que haber evitado que se cometieran los delitos dialogando políticamente a tiempo, eso también hay que verlo.
Y muy interesante será estudiar la inteligencia de los encarcelados, si permiten que los cobardes huidos que se esconden tras una dignidad que no tienen, lleguen a obtener el premio de presidir y gobernar toda una comunidad autónoma.
Muchas cosas tenemos que analizar, y no sé si ya vamos estando cansados de tanta desfachatez y hartos de seguir pagando a quién no nos gobierna.